Trastornos por uso de sustancias/Adicciones

¿Qué son las adicciones y los trastornos por uso de sustancias?

Un trastorno por uso de sustancias describe un patrón problemático de consumo de alcohol u otra sustancia que provoca una angustia o un deterioro evidentes en la vida diaria. Un individuo con este trastorno a menudo continuará usando la sustancia a pesar de las consecuencias.

Hay 10 clases de drogas que pueden conducir a un trastorno por uso de sustancias:

  • Alcohol

  • Cafeína

  • Cannabis (marihuana)

  • Alucinógenos (LSD, éxtasis)

  • Inhalantes

  • Opioides (heroína)

  • Sedantes/hipnóticos/ansiolíticos (medicamentos contra la ansiedad, barbitúricos, somníferos)

  • Estimulantes (anfetaminas, cocaína)

  • Tabaco / Nicotina

  • Otras

+ ¿Qué tan comunes son los trastornos por uso de sustancias?

El abuso de sustancias afecta a unos 25 millones de estadounidenses. Aproximadamente el 14% de las personas desarrollarán un trastorno por consumo de alcohol y el 7.5% desarrollará otro trastorno por consumo de drogas a lo largo de su vida.

+ Signos y síntomas

Una adicción (o trastorno por uso de sustancias) se caracteriza por lo siguiente:

  • Uso compulsivo de la droga, lo que implica una preocupación por obtener y usar la droga
  • Uso continuo a pesar de las consecuencias dañinas
  • Un deseo o ansia por la droga
  • Dificultad para dejar de usar la droga o mantener la abstinencia

Las personas con un trastorno por uso de sustancias pueden usar una droga o beber más de lo previsto originalmente, o pasar más tiempo bebiendo o consumiendo en una ocasión determinada. Su consumo continuo de alcohol o sustancias puede hacer que descuiden sus obligaciones domésticas, laborales o escolares, o con los demás, y/o que abandonen las actividades recreativas que antes disfrutaban. Pueden persistir en el consumo incluso cuando afecta negativamente su salud mental o física o se convierte en una fuente de conflicto en las relaciones. Pueden continuar usando alcohol o sustancias incluso aunque tengan que manejar o estén en situaciones peligrosas. Es posible que necesiten aumentar la cantidad de alcohol o drogas que consumen para obtener el efecto deseado. Y pueden experimentar dolorosos síntomas de abstinencia, como náuseas, ansiedad, temblores en las manos, irritabilidad, fatiga o convulsiones (inducidas por el alcohol) cuando dejan de consumir.

Con la adicción, el cerebro de la persona se sensibiliza a las señales del entorno y a los estados emocionales, como el estrés, que se han asociado con el consumo. Como resultado, la urgencia o el deseo de volver a consumir la droga se vuelve apremiante.

La recaída (es decir, el regreso al uso de drogas o alcohol) es común en la adicción. Si eso ocurre, será necesario evaluar al paciente para determinar el nivel de atención más adecuado. Con esfuerzo constante, la mayoría de las personas pueden razonablemente recuperarse de una adicción.

+ Diagnóstico

Cuando se diagnostica un trastorno por uso de sustancias, se clasifica como "leve", "moderado" o "grave". El término “adicción” no se considera un término de diagnóstico y se prefiere el término más neutro “trastorno por uso de sustancias”. Sin embargo, los médicos suelen utilizar el término "adicción", en particular cuando un trastorno por uso de sustancias se considera "grave". La palabra “dependencia” también se ha utilizado para significar lo mismo que adicción. Se ha utilizado “abuso” para referirse a un patrón de consumo de drogas considerado menos grave que la dependencia o la adicción.

En este momento, el apostar o la adicción a los juegos de azar se reconoce como el único trastorno no relacionado con sustancias que, cuando es grave, puede considerarse una adicción.

+ Tratamiento

La desintoxicación es a menudo el primer paso en el tratamiento. La desintoxicación significa eliminar del cuerpo de forma segura las sustancias que se estaban usando. Este es un procedimiento médico que puede requerir hospitalización o puede realizarse de forma ambulatoria, según la gravedad de los síntomas.

Después de la desintoxicación, muchas personas se beneficiarán de la rehabilitación hospitalaria, que puede durar 4 semanas o más. Las alternativas a la rehabilitación hospitalaria son la hospitalización parcial o los programas ambulatorios intensivos, en los que el paciente participa durante 4 a 6 semanas o más.

Hay varios medicamentos que han sido aprobados para el tratamiento de la adicción. Se recomienda una consulta con un psiquiatra de adicciones u otro médico que tenga conocimientos sobre el tratamiento de la adicción.

La mayoría de los médicos y programas de tratamiento también animan al paciente a participar en un programa apropiado de 12 pasos, como Alcohólicos Anónimos, Narcóticos Anónimos, Cocaína Anónimos, etc.

+ Afecciones concurrentes

Se dice que una persona que tiene una adicción al alcohol o las drogas y una enfermedad psiquiátrica tiene un diagnóstico dual o un trastorno concurrente. Para recuperarse por completo, la persona necesita tratamiento tanto para el uso de sustancias como para los trastornos mentales.


Fuentes:

Alianza Nacional sobre Enfermedades Mentales
The Kim Foundation

Enlaces útiles:

Instituto Nacional sobre el Abuso de Alcohol y Alcoholismo

Alcohólicos Anónimos

Cocaína Anónimos

Narcóticos Anónimos